¿Prohibición de retardantes de fuego para limitar la contaminación del agua? No tan rapido.

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Según la Ley de Política Ambiental Nacional de 1969, una de las primeras leyes ambientales federales importantes, un principio básico de la regulación es un análisis de costo-beneficio que examina las consecuencias de todas las alternativas que se consideran en respuesta a cualquier problema en particular. El enfoque inteligente reconoce la preocupación reflejada en un dicho muy conocido: A veces el remedio es peor que la enfermedad.

Actualmente se está desarrollando en Montana un caso judicial federal centrado en esta preocupación; uno que, según advierten los bomberos, tiene implicaciones sombrías para la capacidad de California de combatir los incendios forestales masivos que se han vuelto mucho más comunes en la última década debido a las condiciones más cálidas y secas. generada por la emergencia climática. Lo que está en juego es el uso por parte del gobierno de retardantes de fuego aéreos para responder a incendios forestales gigantes que no pueden controlarse con otras tácticas. El grupo que presentó la demanda, Empleados del Servicio Forestal por la Ética Ambiental, dice que esto viola las leyes federales de agua limpia porque la lechada roja tóxica que se utiliza puede contaminar los cursos de agua. Pero en lugar de trabajar con agencias estadounidenses para desarrollar un plan para limpiar rápidamente las vías fluviales después de que se use retardante de fuego, el grupo busca una orden judicial que bloquee su uso hasta que las autoridades obtengan un permiso de contaminación, lo que podría llevar años.

El presidente de la Asociación Forestal de California, Matt Dias, dijo que es “aterrador” contemplar la próxima temporada de incendios si las agencias federales no disponen de retardante como herramienta. Representantes de la ciudad de Paradise, en el norte de California, donde el Camp Fire de 2018 mató a 85 personas y destruyó la ciudad, son parte de una coalición que advierte sobre los riesgos drásticos que crearía una prohibición. Uno de esos peligros es (espérenlo) la contaminación masiva. Los investigadores estiman que los incendios forestales de California emitieron alrededor de 127 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono en 2020, en comparación con alrededor de 65 millones de toneladas métricas de reducciones de dióxido de carbono que el estado logró en los 18 años anteriores. Las preocupaciones ambientales deben sopesarse cuidadosamente frente a la muerte, los daños y la contaminación que pueden causar los incendios forestales.